El veterano defensor mexicano Ómar González es nuevo jugador de Chicago Fire. Nacido en Dallas, Texas, y de padres mexicanos, acumula una vasta experiencia que le permitirá ser el líder de una defensa que el año anterior tuvo una campaña para el olvido.
A sus 36 años acumula tanto recorrido como títulos, lo que servirá para contagiar a una plantilla que hace rato no es protagonista de la MLS y que espera este año, de la mano del nuevo estratega, Gregg Berhalter, pueda llegar a la postemporada y luchar por el título.
Ómar fue seleccionado en el draft de la MLS en 2009 por Los Angeles Galaxy y a partir de ese momento comenzó una carrera de éxitos que lo han llevado a jugar también en Toronto, New England Revolution y Dallas, de la MLS.
González tuvo un paso por el fútbol mexicano entre los años 2015 y 2019 con los equipos Pachuca y Atlas y estuvo un año en Alemania con el FC Nuremberg.
Imán para los títulos
Considerado un imán para los títulos, Ómar ganó el galardón como el novato de la MLS en 2009, ese año fue campeón de la Conferencia Oeste de la MLS. En 2010 ganó el Supporter´s Shield con el Galaxy.
En los años 2011, 2012 y 2014 fue campeón de la MLS con el mismo equipo de California. En 2016 fue campeón con el Pachuca en la Liga de México. En 2017 ganó la Copa de Campeones de la Concacaf con Pachuca y ese mismo año ganó la Copa Oro con la Selección de Estados Unidos.
Su experiencia incluye, además, juegos de eliminatoria al Mundial de Fútbol de 2014 y varios partidos de ese evento orbital, el campeonato canadiense y todas las competencias de la Liga Profesional de Fútbol de los Estados Unidos.
El mexicano firmó un contrato hasta finales de la temporada 2025 con posibilidad de extenderlo un año más y se convierte en el tercer defensor central fichado este año por el Fire, después de Jack Elliot y Sam Rogers.
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