El capitán del Girona, Cristhian Stuani, reivindicó en la fiesta de final de temporada y justo después de la victoria por 7-0 contra el Granada de este viernes que lo que ha vivido este año el equipo «es increíble e histórico» y que el curso que viene el equipo va a «disfrutar» y va a estar «en un lugar que va a ser un sueño», la Liga de Campeones.
Stuani dio las gracias a la afición, por estar al lado del equipo «en los momentos duros», quiso felicitar al equipo por un año «impresionante» y pidió un aplauso para Míchel Sánchez, un entrenador que «con su ambición» ha guiado el camino del Girona. Se mostró «muy orgulloso» de equipo y de la afición y dijo que «Girona late fuerte», en su primer discurso en catalán.
También cogió el micrófono Portu, para celebrar «una temporada histórica» y alabar un vestuario que es «una familia increíble».
Instó a todo el mundo a «disfrutar al máximo este momento» y se mostró feliz porque las caras y lágrimas de tristeza de años pasados ahora son «de felicidad».
Míchel también dio las gracias a la afición, por acompañar al equipo en una temporada «histórica», y a los jugadores, «los mejores jugadores que puede tener un entrenador».
También pidió a la grada si piensa que el equipo ha tocado techo y gritó que él tampoco lo cree, entre los habituales cánticos de ‘Míchel, català’.
La fiesta acabó con fuegos artificiales y una vuelta de honor al estadio y continuará el domingo, con una rúa por las calles de la ciudad y más parlamentos.
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